
Diabetes
de enfermedad crónica a epidemia mundial.
En la actualidad se considera que la diabetes es uno de los mayores problemas de salud que enfrenta el mundo, esto debido al aumento progresivo en el número de personas diagnosticadas y a su vez por la repercusión en el impacto económico dado que afecta a la población en edad productiva; impacto sanitario, debido al aumento en el número de consultas a los servicios de urgencias, requerimiento de tratamientos en Unidad de Cuidados Intensivos, cirugías, rehabilitación o cuidados paliativos por sus complicaciones que son causa de ceguera, insuficiencia renal, infarto agudo de miocardio, accidente cerebrovascular y/o amputación de los miembros inferiores; e impacto psicosocial, por la afectación en la salud mental dadas las limitaciones físicas que genera cuando no es tratada de manera oportuna, y la necesidad de consumir varios medicamentos o administrarse insulina diariamente, de igual manera la carga emocional a sus cuidadores y/o familiares, afectando la calidad de vida de las personas que la padecen, y convirtiéndose así en una epidemia mundial como lo han considerado expertos que estiman que en personas de 20 a 79 años de edad, 8 de cada 100 personas tiene diabetes, y que para 2040 será de 10 por cada 100.
Las muertes atribuidas a esta enfermedad son de aproximadamente 2,2 millones cada año a nivel mundial. Según organismos internacionales esta será la séptima causa de mortalidad en el mundo, y en la actualidad es la séptima causa de muerte en Colombia. Los factores de riesgo universalmente aceptados para el desarrollo de esta enfermedad han sido: el aumento de la obesidad, el consumo de azúcares y el sedentarismo ocasionado por el desarrollo tecnológico, aumentando así el riesgo de desarrollar diabetes desde la infancia.
Lo anterior nos permite evidenciar que no se trata de una problemática de la “edad adulta” y mucho menos una condición aislada de unos pocos, o cuestión “de herencia”, es por el contrario una situación que nos involucra a todos ¡un problema de salud pública!, reforzando así la necesidad de que el sistema de salud en conjunto con otros sectores como ambiental, económico, agrícola, social, educativo, deportivo, entre otros, enfoquen esfuerzos en la promoción de la salud para evitar el desarrollo de esta condición, diagnóstico oportuno, prevención y limitación del daño que causa esta enfermedad crónica.